viernes, abril 08, 2005

Ocasiones

Tengo el momento

hablemos

del tiempo

antes de caer

en los cuentos

que me negué a contar

de ti,

de mi,

de los dos,

del corazón,

casa gigante que no ve la fortuna,

cuando me miras

antes que intente robarte un beso

lo sabes no dices nada solo juegas a que no saber nada

y yo lo se

no me engaño

te deseo, te encontrare,

moriré soñando o despertare amando.

Los sueños que encuentro

en el reflejo de un espejo son falsos,

no es un espejo son tus ojos,

tu mirada,

que aprisiona los miedo expiándolos

como si tus lagrimas fueran agua bendita

que dios expulso desde Sion

hasta tu rostro enmudecido por tu sonrisa de ángel

triste por no cantarle mas a dios,

dulce por sentirse viva,

ahora tenemos algo en común,

no podemos apartar la vista de los ojos de alguien

yo de ti, tu de alguien mas,

se aproxima un final triste

que un cuento podrá iniciar

el viento menguado por tu aliento

me dirá que no llame mas a los ángeles

ellos vendrán algún día...

Algunas veces puedo volar

me encuentro entre todos los árboles blancos

esperando una vida

que mañana me pintara un sueño

necesito una canción

para decir lo siento

otra para decir ven conmigo

al cielo.

Volar entre las nubes

que vienen aquí

donde nosotros caemos como ángeles

la ultima ves sonreíste

yo no supe que decir

pero los caminos en el cielo son extremos

tan libres como el viento

que se rompe en nuestros rostro,

ven

acompáñame a volar

y tal vez a caer como ángeles

enséñame a volar

muéstrame los vientos ligeros

para no caer como un ángel y quedarme

aquí arriba contigo.

Algo maravilloso

está a punto de ocurrir.

Lo sé

porque se me queman los dedos.

Lo sé

porque se me queman los ojos.

Lo se.

Cree en mi una vez mas

realmente las cosas son mágicas

conversamos con las nubes y miramos el amanecer,

entonces porque no creer en mi?

que me puedes tocar,

que me puedes mirar,

que me puedes besar.

Es tarde para poder librarme

de los sentimientos,

para sentirme abatido de nuevo,

eso no importa

nada importa

y aun que no pueda cambiarlo

me quemo

cuando te miro

cuando te acercas

cuando te vas...

A la chica que habita en el sur

Después del horizonte

se me pierde tu imagen,

detengo

el horizonte

te observo una vez mas

casi sin querer,

no hay nada aquí

todo esta allá

ante tus pies.

A la chica del Piercing

Silencio

Silencio

Formas rotas

huelen a café

aliento de vida por la mañana

justo en el atardecer,

no te puedo olvidar;

quiéreme aunque no quieras

deséame aunque no quieras

matame aunque no quieras

todo aunque te duela,

yo a veces te mataría

otras solo te quisiera comer.

Al ángel de mi soledad