domingo, diciembre 17, 2017

En un amor, la mayoría busca una patria eterna
Otros, aunque muy pocos, un eterno viajar
Estos últimos son melancólicos que tienen que rehuir el
contacto con la madre tierra

Buscan a quien mantenga alejada de ellos la melancolía de la
patria
Y le guardan fidelidad
Los tratados medievales sobre los humores saben de la
apetencia de viajes largos de este tipo de gente que va.
Yo no te bajaré la luna y las estrellas para que en el día las pierdas, yo dibujaré en tu cuerpo poesía con mis dedos. Yo no te diré que eres el amor de mi vida, porque eres el amor en el momento. No te amaré de esa forma tan común, te amaré con miradas y caricias, dejaré que me robes el aliento, te daré mis pensamientos. Todo lo que esté en mí será para ti
Voy a construir una guarida, una fuerte, en donde todo el que quiera podrá entrar. No estoy hablando de los días en los que escribía y me escondía, no hablo ni de ti ni de mi. Hablo de la luna y de las veces que estuve allí... En las noches que me acompañabas...
Voy a construir un muro, donde colgar mis pensamientos, amaré cada imagen tuya, siempre, sobre todo cuando no estés más...
Y volveré algún día a cada lunar, a cada cicatriz que dolió. Y derribaré cada "nube sucia" que llueva sobre mi, los rayos serán la luz que ilumine mis pasos oscuros... Pero como dice Quique González; no..hoy no, hoy no me detendrán...
Me he cogido in fraganti pensando, al cruzarme con una chica extrañamente vestida, esto: "O va fatal, la pobre, o es que es así la última moda..." Vaya, qué bajo estás, me he reprendido, abochornado. Porque sea la última moda no va a dejar de ir fatal, la pobre. Te descuidas un poco y se te pega, qué vergüenza, el espíritu de los tiempos.