Azota ya nuestros futuros
vamos a encontrar en otro tiempo y en otro lugar,
las cadenas del tiempo y el espacio
mi espíritu se eleva deja que estos brazos mortales abracen la vida que antes existió,
este tiempo y en este lugar,
tráeme aquí y llévame allí para así ocupar su lugar,
trae a hasta mí quiero ver,
cruzar la historia desde este lado.

Esta aturdido, no encuentra solución al problema que lo atormenta, no sabe que hacer, su mundo se reduce y el pavor se apodera cada vez mas de sus facultades, su mente se niega a funcionar es que si solo pudiera ver una pequeña luz al final del túnel, pero nada es alentador, lo que le espera es triste. Sabe que debe actuar, al llegar a su casa, su mujer espera por noticias y habrá que darle conzuelo, pero de donde lo conseguirá para alentarla y mentirle diciéndole que deben esperar, todavía no esta dicha la ultima palabra, aun puede pasar un milagro, pueden repetir los examenes y que el resultado sea erróneo, que se equivocaron, que se extraviaron los datos y los médicos piden infinitas disculpas. Todo puede ser, pero algo le dice que nada de esto ultimo es. La realidad es cruel, dicen que se puedes cambiar tu mundo con solo pensar de manera positiva, vamos a cambiarla, unanse a nosotros y formemos un cordón de energía positiva a ver si la desgracia no encuentra puerta para entrar a mi familia. Vamos, ayudenme!!, Parece gritar. El sumbido del tren se escucha, avisando de su llegada,la estación esta repleta de gente a esta hora de la tarde, cada vez el tiempo es menos, solo media hora lo separa de la llegada a su casa, ahora no hay escapatoria, debe hablar con ella y decirle la triste verdad. Recuerda poco de sus comienzos, nunca supero la perdida de sus padres siendo muy niño aun, de ahí que siempre le ha sido difícil hablar teme no hacerlo bien y claro ante su compañera, pero sabe que no conoce la palabra rendición, y eso le anima a saber que debe seguir y que sea lo que sea saldrá adelante y sobrvivira. Sube al tren y comienza a idear un plan, rebusca palabras para decirle la cruel verdad a su esposa, el tren arranca a velocidad suave y va subiendo, al salir del túnel ve que llueve a cantaros, y piensa: En la lluvia esta Dios, entiende que le esta ayudando en su desdicha de alguna manera, siente un poco de paz, su ritmo cardiaco se va calmando, una ligera oleada de calidez invade su alma, poco a poco se va calmando recuerda que ha pasado por situaciones tan duras como esta y ha sobrevivido a ellas.. El tren avanza y el continua en su mundo desorganizado y complejo, tramando lo que dirá a su llegada a la casa, baja en la parada acostumbrada, camina lento y pausadamente, el camino es corto, dobla la esquina y vislumbra a lo lejos a su mujer que lo espera ansiosa, continua caminando con el paso cansado, al llegar frente a ella le sonríe y eso la llena de tranquilidad, entiende que los estudios salieron negativos que nada malo va a pasar, porque de ser así, el no estuviera tan sereno, ella le toma de la mano y se dirigen dentro de la vivienda, ella feliz por que su hija vivirá y crecerá para convertirse en una mujer.

El siglo de las luces os ha vendido plenamente y majestuoamente esa idea de la libertad, pero ellos bajo la luz cegadora ministraban un cierre a la cultura, una negacion del pasado y de las artes, que hoy en dia se mantiene como un ejemplo del progreso, de la cultura y la evolcuion moral humana... saben que, me paso por los cojones la revolucion francesa, su enciclopedia y su siglo de las luces, en la edad media habia mas iluminacion en una vela, que en esa diafana antorcha de la "liberte" francesa

Juego de Tronos, que yo no aconsejaría. Son aproximadamente 50 horas de serie, aunque como he pasado las escenas de violencia extrema y de sexo innecesario, quizá para mí hayan sido 15 ó 20. No es una obra de arte y sus famosos diálogos no son para tanta fama, pero sí ha sido una experiencia realmente interesante. Creo que he estado muy, muy cerca de las lecturas de libros de caballerías (mediocres, fantasiosos, aduladores del lector, irreverentes) que criticaba, entre otras cosas, Cervantes en el Quijote. Ha supuesto acercarme a nuestra obra magna por detrás o dejar que se me acercase don Quijote de la Mancha, lanza en ristre, a sacarme del hoyo de la ficción más enredada. Y ser salvado por nuestro ingenioso hidalgo sí merece la pena.
Aunque Seguro ni conoceis los nombres de Crethien de Troyes o Maria de Francia... caso perdido