Una de las habilidades resaltantes de los Romaní además de la magia, era la adivinación de la fortuna, tanto como las maldiciones ( la famosa maldición gitana o la de la horca), todos esos elementos forman parte de su cultura que se ha transmitido de generación en generación. Hasta no hace mucho tiempo practicaban la quiromancia, pero, por abuso, por comerciar con ella, han ido perdiendo esta habilidad.
Las gitanas más conocedoras (aún quedan algunas) sostienen y argumentan
con bases sólidas que la efectividad de la magia gitana esta basada en
el respeto de los cuatro mandamientos fundamentales de su poder que por
ningún pretexto debe ser violada jamás, estos mandamientos deben ser
considerados en cuenta al momento de la practica mágica Romaní.
1. El deseo: la primera ley sostiene que la efectividad del hechizo depende de la intensidad del deseo, mientras mas intenso sea el deseo mas seguro serán los resultados y el efecto del hechizo.
2. Intensa concentración: la segunda ley consiste precisamente en mantenerse bien concentrado durante el ritual, nada ni nadie deben distraer al mago o al oficiante del ritual, si el mismo se distrae o interrumpe de forma abrupta el ritual debe pedir perdón a los espíritus (Diosa y Dios, los Ángeles, los dioses o en el estilo gitano a Devel) y comenzar desde el principio el ritual nuevamente.
3. Infinita paciencia y constancia: la tercera ley recomienda tener paciencia o en otros casos tener constancia en el deseo, pues cualquier deseo que se siembra, debe siempre crecer poco a poco como una planta o en otros caso se debe tener primero las bases sólidas y paulatinamente se construye el resultado, como una casa.
4. Actuar siempre en secreto: la ultima ley o el ultimo mandamiento, quizás el mas importante y vital de todos, afirma que siempre y resalto siempre se debe mantener en secreto el ritual, jamás por ningún motivo o pretexto debemos decir que estamos haciendo un ritual ni cual es su objetivo esto es de vital importancia tomarlo en cuenta, por que de lo contrario el ritual se debilita, se enferma, y finalmente se muere.
1. El deseo: la primera ley sostiene que la efectividad del hechizo depende de la intensidad del deseo, mientras mas intenso sea el deseo mas seguro serán los resultados y el efecto del hechizo.
2. Intensa concentración: la segunda ley consiste precisamente en mantenerse bien concentrado durante el ritual, nada ni nadie deben distraer al mago o al oficiante del ritual, si el mismo se distrae o interrumpe de forma abrupta el ritual debe pedir perdón a los espíritus (Diosa y Dios, los Ángeles, los dioses o en el estilo gitano a Devel) y comenzar desde el principio el ritual nuevamente.
3. Infinita paciencia y constancia: la tercera ley recomienda tener paciencia o en otros casos tener constancia en el deseo, pues cualquier deseo que se siembra, debe siempre crecer poco a poco como una planta o en otros caso se debe tener primero las bases sólidas y paulatinamente se construye el resultado, como una casa.
4. Actuar siempre en secreto: la ultima ley o el ultimo mandamiento, quizás el mas importante y vital de todos, afirma que siempre y resalto siempre se debe mantener en secreto el ritual, jamás por ningún motivo o pretexto debemos decir que estamos haciendo un ritual ni cual es su objetivo esto es de vital importancia tomarlo en cuenta, por que de lo contrario el ritual se debilita, se enferma, y finalmente se muere.