Te, encontrare

No importa que mis ojos

queden encostrados

decorados con rojo mortecino,
ni que las moscas crezcan sobre las cuencas vacías de mis rostro
podre mirar una sola vez
mientras dure la eternidad,
suficiente para llevarte a la ruina,
nombrare mi perdición
aliento fétido de cadáveres sin ritos,
antes de morir en tus manos
durmiendo para siempre con una sonrisa,
te recordare que el destino
se rompe como cuerda
ante el filo de una espada,
estaré ligado a el sueño
en el cual tengo prohibió entrar
ningún encanto en el mundo mortal
impedirá que en mi muerte
reclame todo aquello que me fue arrancado en vida
incluyendo venganza
o tu corazón como trofeo.

Mañana

Mañana
me cortare las venas
ahogare entre mis sueños
color carmín,
la mitad de mis esperanzas y el resto de la desgracia,
por nada se esfumara esta sonrisa de perverso intelectual
todos los oscuros rituales apócrifos
no funcionan en mi piel
perfecto cemento de lapida para muerto,
ahora un generoso suspiro
dona al viento ilusión.

Se puede resistí un poco mas
lento encierro
melancólico de tablas y clavos
no has venido para marcharte tan rápido
dejas esa marca como un tibio deshielo
si, regresaras, sin enterarme,
si vendrás, tan veloz
cómo anuncio en la noche alborotada,
implacable trasgresión a la decencia
de la espera,
ya es hoy nunca será mañana
mientras espero
casi inmortal escuchando al viento
sin saber del saludo o despedida
de esa imagen de la luna en mis adentros.