domingo, octubre 22, 2017

Imposible, no me resisto
más. No puedo
aguantarme el alma.
Ni el deseo
unánime de los sentidos.
Arrebatado la miro,
tan bella,
como recién creada.
Y la transmiro,
y alargo mi mano, y mi vida.
Todo, lo que sea,
por una simple caricia
de esa rosa amarilla.
Invocare a las diosas tristes de la ruina
para que carguen en ataúdes las cenizas
de toda mi esperanza incinerada
en los montículos de mi corazón,
recordare ávidamente los días que asistí a comer en la mesa de los héroes
sin haberme ganado la amistad de tus muslos,
musa descendiente de Hecate
tus marcas y tu hechizo
cae sobre mi
y es puro el filtro en mis adentros
que ni siquiera se necesito un sello
para proteger mi alma de los maleficios
que has perjurado en contra de mi hombría rendida
ante la mas pequeña de todas las artes,
a si que hoy pediré que vengan por mi en un cortejo fúnebre
para desposarme damas blancas,
mi cuerpo esta listo adornado con la corona de flores
ansioso a recibir el beso
de la ternura abismal de la nada y el caos,
ruina, para la vida
ruina para el amor
ruina para mi existencia consagrada a la muerte.
«yo vi tu atroz escama,
Melusina, brillar verdosa al alba,
dormías enroscada entre las sábanas
y al despertar gritaste como un pájaro
y caíste sin fin, quebrada y blanca,
nada quedó de ti sino tu grito»
[« I saw your atrocious scales, Mélusine,
shine greenish at dawn,
you slept coiled in the sheets
and on waking you screamed like a bird
and fell endlessly, broken and white,
nothing remained of you but your scream.»]
Voyeur.
.
«Raymond spies on Melusine and discovers her secret.»
Roman de Mélusine, c. 1401-1500, Français 24383, f. 19v, Bibliothèque nationale de France, Département des manuscrits.

Tengo las flores para un funeral,
mil velas negras
para bañar el cuerpo inmóvil con luz,
sellar ese cuerpo que es tantos cuerpos
con paz,
cera negra con la cual no decir más,
frente a la belleza incólume
de una noche solitaria,
en la que veo mi reflejo por el rabillo del ojo...
un cruz de plata bañada en un río
a la luz de la luna,
crió a los cuervos para que canten en coro
he depositado mi sangre en un relicario
para enterrarlo junto a ti,
en aquel cementerio lleno de fantasmas
tu recuerdo en mi memoria
será la eternidad de los pensamientos.