sábado, enero 13, 2007

A mis brujas,
ellas que viven en la montaña
rodeadas de árboles,
las que me inspiran musas de mi soledad.


Arriba en el Cerro

También se que en los cerros
hacen sus sesiones las brujas
cantan, bailan, y a veces se desnudan bailando
invocan a los diablos espíritus del ayer,
dioses antiguos y a su madre la luna,
se les ve como bolas de fuego
que bajan rodando desde el cerro,
bajan chupar la sangre de los niños pequeños,
principalmente de aquellos que no están bautizados,
en forma de nube, guajolota o gallina
se roban al infante,
le muerden y hacen moronga,
para que el marido almuerce en la mañana,
antes de ir a trabajar al campo,
se de las brujas aquí en México
no son como las demás
aquí tienen un encanto prehispánico
y un misterio europeo,
no visten de negro
pero saben usarlo,
caminan entre los pueblos
curan a los perros, son madres, y hermanas
venden carne o verdura algunas yerberas son,
pero todas vuelan cada tres meses,
al cerro ahí arriba donde los árboles les cuidan,
donde la luna esta mas grande
junto a una cueva o una río
las brujas se disfrazan de ave negra y cantan como el búho
traen tecolotes,
lobos aullantes,
en sus morrales la sangre de los niños
lista para preparar en sus cazuelas de barro,
las brujas bajan como bolas de fuego atropellándolo todo
si miras en la noche arriba del cerro las veras
son luces brillantes pinturas siniestras,
nada de belleza encontraras
si les temes a la noche y a sus hijas,
se cuentan tanto de las brujas
pero jamás entenderás
hasta mirar por la noche el vuelo de las gallinas
el aullido del lobo
y el fuego en el cerro del encantó misterioso
de las brujas de México.
Te digo algo ven pronto, te nesesito, o es que quieres que vaya prti, adonde como encontrarte? dime algo, tu ausencia me mata, y sobretodo tu silencio, te nesesito no sabes canto talvez tu me puedas mostrar el camino de la muerte, yo solo tengo mi vida para ti te amo estoy enamorado de ti de tus misterios y manias de ti