lunes, febrero 23, 2015

MIS OJOS INGRÁVIDOS



MIS OJOS INGRÁVIDOS

Siempre alumbrada, siempre buscando la luz y la claridad
de las palabras sin horizonte por infinitas,
sin límites y sin escondrijos.
Iluminada por lo real que junto a lo irreal
se disputan un sitio en mis poemas.

Lo que no es también está (que decía áquel)
detrás o en algún sitio
como algo invisible y oculto.
lo irreal junto a lo real.
...
La imbricación del azar también
en partes aleatorias donde radica el error,
e incluso la verdad.

Y vas presintiendo lo que hay detrás
aquello que está sin estar
los pobladores silenciosos de la materia viva
con sus enzimas y enlaces
como partes de azúcar incontrolada
en algún punto.

Apenas unas palabras encadenadas
y a su vez, atadas a un destino cruel.
No obstante, jugué y erré.

Me disculpo porque aun sin intención de que pasaran por mías,
así ocurrió.

Me disculpo por mi cobardía, porque ya es casi tarde
para gritar. Pero tarde y muy cerca, digo,  lo siento, no debí.

Tus grandes



Tus grandes ojos abiertos,
se han quedo bajo el vacío ignorante,
de tu credo absurdo,
adornado con el cielo de losa oscura,
masa total que lenta desciende y te aboveda
el cuerpo único hoy en la Tierra,
hermoso de buena forma y única virtud
que tacaño por los astros arrastra,
tristeza y pena, la belleza se acaba
 ya lo sabrás el tiempo arremeterá…

sábado, febrero 21, 2015

Tu cuerpo ¿en qué materia,
 ágata, cuarzo, trigo,
 se plasmó, fue subiendo
 como el pan se levanta
 de la temperatura,
 y señaló colinas plateadas,
 valles de un solo pétalo,
 dulzuras de profundo terciopelo,
 hasta quedar cuajada la fina
 y firme forma femenina?

 No solo es luz que cae sobre el mundo
 la que alarga en tu cuerpo su nieve sofocada,
 sino que se desprende de ti la claridad
 como si fueras encendida por dentro.

 Debajo de tu piel vive la luna.

lunes, febrero 16, 2015

Desesperanza



¿Cuál noche de otoño perecí?
este sitio es muy peculiar y aun así en efecto muy usual,
una postal cualquiera boceto de mis lágrimas
ni mejora mi canto hasta la elegía
ahora directamente sobre la piedra inerme
el tiempo ha dispuesto el plan
de lo que va a escribir para el olvido,
esta bellísima casona junto al bosque,
jardines con esculturas, flores coloradas,
allí en medio del frio y nada más.

Pero era más que eso,
un mundo en  ese pantano al oeste,
donde las luciérnagas me invitaban 
a seguirles más allá del bosque,
fue sueño ayer, hoy es tierra
¡poco antes nada, y poco después humo!
y de destino  o ambiciones, no presumo
apenas camine al cerco que me cierra
menos me hospeda el cuerpo que me cubre
ya no es ayer, mañana no ha llegado;
hoy pasa y es y fue, con movimiento.

Oh, mujeres, oh voces, oh miradas, cabellos,
trenzas morenas yo me muero, por tener
luz, amor, sed,
las perlas que el mar mezcla a sus aguas,
aves hechas de luz en los bosques sombríos
luciérnagas invitándome a pasar.

Sorpresa y emoción, como hiciste palpitar mi corazón,
la belleza y la muerte son dos cosas profundas,
con tal parte de sombra y de azul que mirar
dos hermanas terribles a la par que fecundas,
con el mismo secreto, con idéntico enigma.
reposando en el pantano,
era la muerte y eras tú, era la muerte con tu rostro…

Blanca como la nieve, ojos de noche,
labios rojos como la sangre,
dos rostros;
el abismo divino florece en tus ojos,
y la blancura de tu vestido que abruma al romántico
amante de la luna,
más del cielo los dos sé que estamos muy cerca,
tú porque eres hermosa, yo porque soy mounstro.

Pero nada es hermoso para los de mi especie,
tronaron tus palabras sobre mí, sobre el mundo y el tiempo aciago
en el cual habito;
-tonto-
-vete no te quiero ver-
-no te quiero- no te quiero-


Era tu rostro y era la muerte en el mismo ser y debió ser verdad,
pues a nadie he amado como te amo a ti y a nadie más amo
como amo a la muerte, a quien nunca deje amar,
ninguna es mi principio pero si mi final,
te buscaba con ahínco
como buscaba los besos de la muerte
en mi lecho final.

Pero es que mi infortunio era peor que el de todos,
allí estando frente a ti,
burlonamente tu mirada me despreciaba
exiliándome al reino de los olvidados,
claramente expresabas que nadie me amara,
nadie me querrá,  que amor y cariño alguno no conseguiría
“mounstro maldito# gritabas entre canto macabro
y me dolía la muerte, me despojaba amor mío,
“no te quiero vete, no te quiero vete”,
repetías con fuerza y precisamente
al ritmo del canto de los grillos,
del aullido del lobo y del bosque que habla con el viento.

Era yo la nada en tus palabras, el silencio en mis oídos, eras tú,
mirándome en el crepúsculo de mí fe,
que se marchaba convertido en cuervo albo
listo para iniciar el vuelo,
en la noche que  tus alas robaron,
apagando las estrellas y extinguiendo el bosque,
los silencios y olvidos, me quedaba en la nada,
dueño de un abismo perpetuamente colmado de desesperanza,
mudo, SOLO, mirando como la muerte me abandonaba,
en mí, sin nada en este sitio, sin nombre que la muerte me llevo derrumbado.

sábado, febrero 07, 2015

El último aquelarre

Esta historia ocurrió hace algún tiempo, en realidad para ti que lo lees ocurrió hace bastante tiempo. Es la historia del último aquelarre que se gestó en Europa.

Hablamos de un tiempo en el que la magia, los hechizos y las maldiciones gozaban de esplendor. Un tiempo donde seres extraordinarios convivian con la raza humana, donde animales como el unicornio eran reales gracias a las brujas.
En este último aquelarre fue donde comenzó el principio del fin de esta gran época. Justamente hablamos del día que posteriormente se llamaría Samhain, día de los muertos o Halloween.

Estábamos todas las brujas reunidas esperando a que se presentara el señor oscuro, Satanás, para llevar a cabo la gran ofrenda como señal de respeto y alianza. Pero no salió como esperábamos y desató toda su ira contra las allí presentes. Hubo muchas bajas y se perdió gran parte de la magia.

Entre las que pudimos escapar, nos refugiamos en cuevas ocultas y nos repatimos por los lugares más insólitos de la Tierra, decidimos llevar una doble vida y ocultar nuestra verdadera identidad. Usamos la magia para protegernos.Sabíamoss que el último lugar donde el señor oscuro buscaría a sus enemigos sería entre sus propias filas. Así que, con la poca magia que quedaba creamos el conjuro para crear el lesbianismo. Al ser consideradas infieles y malvadas por las creencias reinantes seriamos mejor acogidas por las almas oscuras y el camino del mal.

Desde entonces, todos los años aprovechamos esta festividad para rememorar aquel día y conseguir nuevas brujas para seguir creciendo y haciéndonos fuertes para el día de nuestro regreso.
Por un fallo en el hechizo, surgieron lesbianas que no son brujas. Por eso necesitamos comprobar si en su interior duerme la magia. Tenemos que ponerlas a prueba de una forma que no sepan que es magia ni para brujas. Esa prueba se esconde bajo la apariencia de sexo.

Primero tenemos un encuentro a solas con la escogida. Yo personalmente lo hago así. El sexo oral es un preludio, empiezo con unos mordisquitos por las ingles intercalados de lametones por la vagina, para que vaya lubricándose. Según va cogiendo humedad, voy aumentando el placer. Introducirle un dedo en la vagina a la vez que succiono y estimulo el clítoris con la lengua hace que pase a un nivel superior. Le froto uno de mis pezones por su vagina y luego voy poco a poco deslizándome hasta sus pechos y hasta que llego a juntar mi boca con la suya. Según jugamos ambas con la lengua aprovecho una de mis piernas que he dejado entre las suyas para moverla y acariciarle su zona púbica con ella. De vez en cuando aprieto mi rodilla contra su cuerpo para que note esa presión en su vagina. El siguiente paso es ponerme encima suya y hacer un 69. Pero mientras ella me da sexo oral, yo he pasado a mayores y la penetro con uno, dos o tres dedos, según el nivel de excitación que tenga. No le dejo ni un segundo de descanso en sentir placer. Mi objetivo es hacer que llegue cuanto antes al orgasmo. Es la forma de liberar la posible magia que guarda en su interior
Según voy notando como se le inunda la vagina en fluidos y como va dejando de darme placer a mi para retocerse ella y gemir, yo voy intensificando mis movimientos de dedos por su interior. Hasta que con una mano estoy masajeándole el clítoris y con la otra jugando con su punto G. Cuando llega al clímax del orgasmo, me empleo a fondo en darle placer.

En ese momento es cuando hay que aportar un poco de magia para que si alberga magia en su interior se despierte y se desate. Si la tiene el resultado es que nos teletransportamos a la gran cueva donde están todas las nuevas brujas. Ahí, como si de su propia fantasía sexual se tratase, es cuando su magia comienza a desarrollarse, y luchar contra la magia de las otras chicas. El hechizo afecta a su mente para que se liberen de sus perjuicios y sean libres. Mientras luchan sus poderes por ver cual es el más fuerte, para ellas en su mente solo es un juego sexual donde unas sacan su lado sumiso y se convierten en meros juguetes de las que han sacado su lado más dominante. Parejas, trios, harenes, todo sirve, cuanto más ansias de placer, más obtienen. Pueden manejar a las sumisas a su antojo. Estas dominadoras son las candidatas para convertirse en brujas. Cuantas más sumisas sean capaces de tener y de que les den placer, más puntos tienen. al igual que cuanto más perversiones consigan realizar, estarán más cerca de ser una de nosotras. Según sea de fuerte su deseo sexual, así de fuerte es su poder de dominar la magia que hay en su interior.
Al final solo una de ellas conseguirá llegar al fin del camino y convertirse en bruja como nosotras y recordar todo. El resto de mujeres solo se quedará en un sueño de fantasía sexual que han tenido y no recordarán nada más.

Así poco a poco nos estamos reagrupando para volver a ser fuertes, porque más pronto que tarde, nos volveremos a reunir, juntaremos todas nuestras fuerzas, y volveremos a reinar por encima del bien y del mal sobre nuestros dominios que nos fueron arrebatados.