domingo, marzo 04, 2007

La puerta de entrada a jardín de la muerte

Tres canciones para una mañana fría y gris


Vete vete vete antes que yo
pueda desatar
mis manos de estos harapos

Vete vete vete antes que yo
sienta confundir
mis ánimos con tu reflejo

Vete vete vete antes que yo
aprenda a hilar tu cabello
termine mi armadura

No
como podría adivinar
y no
como podría adivinar
y no sabría
y no sabría
cuanto puedo extrañar

Vete, vete, vete antes que yo
antes que yo
intente evitarlo

No
como podría adivinar
y no
como podría adivinar,
y no sabría
y no sabría
cuanto puedo extrañar.

Lucybell-Vete


Hemos ganado otra vez sin bajar del autobús,
y nadie lo va a contar, no escribáis nada más.
Podemos reconocer, un poco amargo sí es,
si eres un rayo de sol, ver marchitar una flor.
Y si no hay de beber haré orgullo de mi sed,
ya lo dijo un francés mi amor se escribe al revés.

¡Qué más puede darte el mundo
si cada segundo es una primera vez!
Somos verdaderos gigantes
y cada segundo nos mata David.

Y ya verás que el fin pondrá a cada cual en su lugar.
No hay ensayo ni hay error, condenados a andar,
condenados a nadar, y sin ropa que guardar,
y sin nada que ganar.

Meteorizados los dos, somos mujeres de acción.
Si hay algo que ocultar sella tu habitación.
El comando se perdió nada más desembarcar,
el capitán me gritó: ¡Te quiero masticar!
Podemos reconocer, un poco amargo sí es,
si eres un rayo de sol, ver marchitar una flor.

¡Qué más puede darte el mundo
si cada segundo es una primera vez!
Somos verdaderos gigantes
y cada segundo nos mata David.

Y ya verás que el fin pondrá a cada cual en su lugar.
No hay ensayo ni hay error, condenados a andar,
condenados a nadar, y sin ropa que guardar,
y sin nada que ganar.

Somos verdaderos gigantes
y cada segundo nos mata David.
¡Qué más puede darte el mundo
si cada segundo es una primera vez!

Y ya verás que el fin pondrá a cada cual en su lugar.
No hay ensayo ni hay error, condenados a andar,
condenados a nadar, y sin ropa que guardar,
y sin nada que ganar.

La Costa Brava-Dos Ostras



Yo soy solo una piedra
clavada entre la tierra
soñando con que escarbes
y alguna vez me veas

No soy mas que la sombra
del polvo sobre el suelo
el ojo de la hormiga
que se cerro de sueño

Una y otra vez sácame de entre la tierra
llévame hasta donde estés, donde nadie nos detenga

Yo soy esa palabra que tu jamas
dijiste
que se quedo guardada
que se quedo tan triste

Yo soy el crucifico
al fondo de tu iglesia
al cual ya no visitas
al cual ya no le rezas

Y es que hemos muerto de amor
pero el amor nunca muere
amor nunca muere

Fobia -El Crucifijo