lunes, septiembre 11, 2017

"Oremos hoy a los difuntos, pidamos perdon por nuestros pecados, he amanecido en una bañera de sangre, con lágrimas en mis ojos y cuchillas en mis manos...."
Me moriré en París con aguacero, un día del cual tengo ya el recuerdo. Me moriré en París -y no me corro- tal vez un jueves, como es hoy, de otoño. Jueves será, porque hoy, jueves, que proso estos versos, los húmeros me he puesto a la mala y, jamás como hoy, me he vuelto, con todo mi camino, a verme solo.
"Creeis que la muerte es una bala que atraviesa el corazón?....no...¿Una enfermedad que consume el cuerpo?....no...¿Un veneno que corrompe la sangre?...!tampoco lo es¡...La muerte es cuando el mundo te olvida.
No me conocen mis amigos,
me dicen que soy un personaje que me invente
que me pongo esa mascara gris
dicen que mi dolor no existe y que tengo que sonreír
para creerme que soy feliz
no entiendo el porqué o él para que
si es así es lo que siento
no miento pero no hacen caso
es una pena que los amigos no te crean
y piensen en la superficialidad más absurda,
sigo aquí golpeando a ciegas el mundo en una batalla por lo correcto
sin saber si los intentos son certeros o tendrán algún efecto
lo que hago hoy repercute en el futuro
y el futuro jamás está escrito
confiare en mi buena voluntad en mi fortaleza y en mis aptitudes
pelear a ciegas si es necesario
sin saber la causas que levanto, amigos míos
no pretendo me entiendan
tampoco pido comprendan
lo que se, pienso ó creo es mío, mi realidad
que no deseo se convierta en algo que se minimiza como mentira,
importa tanto como no saber adónde voy o adonde concluiré
pero mírame sigo intentándolo
para ser mejor, no me rendiré…y continuare en lo justo de mis actos
que el futuro dirá si fueron certeros,
nosotros confiemos en lo que hacemos en la esperanza y la voluntad
hacia lo justo
es el momento de construir nuestro universo.