Jacarandas
Estas hojas
caen como lluvia
como mis lagrimas,
que caen cuando te vas
en este día tan frió
donde me siento solo,
lagrimas secas;
rojas,
negras,
violetas,
transparentes
no importa
el color
si son lagrimas de tristeza.
Ni la espada o el caballo
la bandera del castillo
son triunfo
si tus vestidos no están
en mi habitación,
ni trofeo o reliquia
son laureles
si tus besos
no son para mi,
ni reino o islas
los prados del Inglaterra
son hogar
si no me miras al despertar
ni ejércitos o escudos
los que jamás se rompen
son seguridad
si no estas a mi lado,
ni rey o dios
el creador de lo maravilloso
me sirven
si tu no comprendes
que no existe mejor reino que tu cuerpo,
espada que tus besos,
rey que tu mirada,
dios que tu celestial figura.
Me desmorone en el acto
al notar
tu llegada
desconcertante
no pude apartar de mi pensamiento
la mirada que marcabas
en mi
me limite a no decir
hermosa eres,
miedo
al desprecio,
a molestar,
miedo a la duda
tal vez si, el tiempo
regresara yo podría
tenerte
nuevamente
no se, imposible
perverso el destino que nos topo
cruzando las miradas
maligno el momento
en el cual, lo se
tu no eres mas para mi...
Maldigo hoy
el día destino
maldigo ahora el momento
mis ojos que vieron
lo que no tenían que ver
que no tengo y extraño
maldigo hoy mi presencia
que no consta en tu mirada,
tu mente,
tu cuerpo
maldigo hoy el destino
que me introduce en mi perdición
maldigo hoy mi soledad.
Entupido corazón
siéntete el culpable
de mi
desgracia.
Tendencias
La perversión a
conquistarte con una caricia
no es de caballeros
es de hombres,
ni matar un dragón
ofrendar mi sangre
es suficiente para conseguir una mirada,
todo es una obra,
una peligro que no explica
lo que ocurre
mientras la vida se pinta un hueco en el suelo
de los recuerdos
que quieren demostrar que están vivos,
hemos perdido
las tendencias
a cabalgar
matar dragones
y conquistar doncellas con poemas.