lunes, julio 18, 2016

Hades amo a Perséfone
se amaron tanto
que esparcieron oscuridad en la primavera
sol en el invierno,
tanto fue su amor
que sus hijos fueron llamados demonios
sus hijas parcas, harpías y furias
hermosamente horribles,
un guiño de ojo basta
para enamorar,
a cualquier dios,
su perfume alquimia de flores y huesos
hechiza a cualquier bestia,
ni hombre e inmortal
se resiste a su presencia.

Perséfone su madre les regalo alas
de mariposas
tan coloridas como las flores de primavera
Hades su padre les dio
poder sobre el destino de los hombres.
Se les nombro
mariposas de Hades,
princesas del reino de los Shides,
desde ese día,
vuelan
en la noche,
en los bosques,
en cada rió o lago
que sea una puerta a su hogar,
buscan
las almas que están a punto de morir
esperando devorar sus sueños,
beben la sangre que es vida
secan el cuerpo
atrapando el alma
para sus padres
en la eternidad
de lo que conocemos como muerte
dejando un cadáver
que los humanos
entierran para sentirse mejor
junto con flores que adornan su camas.
Imposible, no me resisto
más. No puedo
aguantarme el alma.
Ni el deseo
unánime de los sentidos.
Arrebatado la miro,
tan bella,
como recién creada.
Y la transmiro,
y alargo mi mano, y mi vida.
Todo, lo que sea,
por una simple caricia
de esa rosa amarilla.
Aquí me encuentro en escenarios
con valles vacios
empobrecidos me inspiran a escribir
aquí estáticos como mi sombra contemplando el hogar
casi como una foto en blanco y negro
afuera de la ciudad,
guía de muertos turista de piedra,
venga ya ¡octubre!
te llevas siempre mi alegría,
mis esperanzas y mi ánimo,
Octubre que me sabes ha muerto,
¿porque no me has llevado a mi también?
será la venganzas de los inocentes
que no pude proteger,
los que se han quemado en espera de de un rescate,
me apachurran los brazos su manos hirientes
sus gritos de ayuda me atormentan,
mis faltas asesinan los restos de mi alma
a cada día que siguen,
siguen apareciendo en los diarios,
oscureciendo la claridad del mundo,
su nombres marchitos
enmudecidos por el luto de sus familias,
eso será como vivir en el infierno
casi como el olvido, y el destierro del amor,
maestro no dejes de ser uno de nosotros
síguenos impactando “amor”
que si en realidad tú no estás,
nada en este universo merece ser salvado…