sábado, noviembre 10, 2007

Prometí guardar silencio en cada ocasión que legara la depresión a mi alma, prometí no volver a llorar en publico ni desatar el infame crepúsculo de mi carne sobre el piso, esperare a mi alcoba y a mi cama simulada en ataúd para muerto precoz, con los fritos de mil noches, aquí, silencio prometí eso, no puedo claudicar, ya he faltado tanto a las promesas que mis palabras se atrincheren en la garganta antes de salir, antes de abandonarme, hoy quería desvanecerme eh ir a casa, ir a casa, y morir en la plenitud de la vida, que espero caqui? Que deseo aquí?, porque no puedo suicidarme, y consagrar mi cadáver como un sacrificio, que necesito, soy un cobarde porno querer vivir por querer morir y me da lo mismo, nadie lo reprochara, y es terriblemente agobiante eso, nadie lo repuchara, porque a que se debe sin duda solo yo y la culpa es mía, porque estoy vivo? porque no me morir cuando nací como era la divina voluntad, que sentido tiene sufrir y estar vivo en el agónico destino de la soledad, no merezco el amo, no merezco la felicidad y moriré solo así como debió haber sido desde el principio.

los muertos no me necesitan ni tampoco los vivos pero es posible que yo si los necesite