sábado, octubre 15, 2016

El cine es como la literatura, cuando miras una pelicular o puedes ser un lector simple o un buen lector, es simple, quédate en la superficie o adentrate en el gozoso camino de un análisis, no es la trama, las actuaciones, los efectos, la película es un conjunto de todo y autónoma en si.
Todavía los cementerios
se aroman solitarios,
ya lavada la cara
para el Día de los Difuntos.
En las tumbas los líquenes
roban sus nombres a los muertos
y se desposan con la piedra
escribiendo a su antojo el epitafio,
otros linajes, fechas diferentes.
En la ciudad de los vivos,
en un caballete invisible
se alza el lienzo del día;
los puestos de castañas otorgan
su niebla a la tarde de otoño.
Añoro esas conversaciones interesantes... ahora me quedan soliloquios donde el hallazgo es un interinato que deambula entre mi pasion y locura... tan triste es darse cuenta que lo que aman y les importa es un juego superficial adornado do con pueril satisfacción.
cito una frase "Los intelectuales y el poder". El doble papel del "intelectual" debería ser el de ideólogo y crítico y la naturaleza de sus relaciones con el Estado de disidencia y contrapoder pero los actuales "intelectuales" en nuestro país son cómplices arribistas de los poderosos. Es decir los que se creen intelectuales de hoy son de una pésima condición humanista, ignoran a los griegos, ignoran a los intelectuales del siglo XIX y principios del XX, trabajan para las grandes corporaciones de medios de comunicación enajenantes. ¿Pero quien les dio el papel de intelectuales? ¿Porque se creen intelectuales? ¿Por que la gente les dice intelectuales?

 yo que yo creo como siempre es que el problema viene de la revolución francesa y sus castradores de cultura intelectuales señores del siglo de las luces, El Humanismo nace en la edad media que a nadie se le olvide.