viernes, abril 13, 2018

Que si tú quieres te vuelvo parte de mis mañanas con canciones melancólicas y tazas de té con un toque de leche. Que si tú quieres te cuento de mis juegos de niño y las tardes frías en las que mi mamá preparaba café con piloncillo para después contarnos historias de brujas y nahuales. Que si tú quieres te dibujo monitos de colores con sharpies de colores mientras estamos acostados viendo series sin sentido. Que si tú quieres un día que ya no estés contenta te nombro “olvido”.