Obituarios

No maldigas la oscuridad enciende una vela

Si me ausento del mundo,

de la vida entregando sorpresas con la piel verde

escamosa de días sin tener el calor de la vida

no hagas caso es cosa mía

que ahora es que ya tengo el mundo a mi favor

vida sin sentirla y muerte sin gozarla

entre tormentas de lagrimas que no me abatirán mas

ya no canto es verdad pero puedo besar aun sin los labios decorados

mira mis dientes aun del color del marfil son

y mi cabello apenas comienza a crecer

no estoy muerto

solo es que es un presentimiento de cómo seria

sí mañana tendría que irme a morir

ni tu mirada ni el alba detendría el desgaste vanidoso de la naturaleza

ante un cadáver perfecto

pero aseguro vida mía que el sufrimiento de la ancianidad

solo seria ya tesoro lejano que no me corresponderá vivir

aun que ya nada importa

te sigo escribiendo

pagando con sangre mis errores

prefiero morirme,

a ya no tener tu vos en el viento,

ni tener la esperanza de algún día mirar tus ojos

mientras me devoran tus dedos

rompiendo la serenidad de mi piel latente,

antes de regresar a la oscuridad de mi destino

si llegaras a buscarme una noche

que los demonios mueran y mi alma llore de felicidad

que despierten las mariposas, las luciérnagas y los escarabajos

que al amanecer solo quedaría mi cuerpo que grita sin intención

sobre las penas que no existen

en la noche que sin sentido

no amanece nunca

es noche eterna

con ausencia, de vida con muerte ni aliento

sollozos de un muerto que no deja de morir,

ante la gloria de una luna roja

que en realidad es un fénix envuelto en la negrura de la noche

esperando explotar

como una supernova para quemarlo todo

en su aleteo hermosamente mortal…

es un vicio constante

una droga y veneno

que me aferran a la vida

sin ella no estaría aquí,

me convertiría en una sombra

envuelta en la oscuridad perpetua de la noche

sin pequeño trozo de luz

a la espera de la incertidumbre

abismos que se cierran

absorbiéndolo todo

ahora el desconsuelo lleva el nombre de los dioses la muerte

en mis manos la sangre de un sacrificio y mi cuerpo reclama de ti

de tu vos,

de tus besos y tu aroma, no estoy preparado para dejar de esperar

ni otoños o inviernos

solo quiero encontrarme desvelado entre tu vos

si has de dormir bajo un árbol y escuchar mi voz

te ruego jamás dejes de despertar que soy yo el que te necesita en este mundo

un mundo donde los héroes no comprenden el mundo

solo luchamos por el

tu eres vida, muerte en mi mundo infinito de hechizos, lunas

constantes de silencio

todo lo que yo amaba de los hilos se escapo

ahora estoy tan confundido

que la lluvia es humo alrededor de mis cuerdas vocales

donde esta mi rendición o los fragmentos de mi alma atrapada entre tus manos

hermosa Sibila aun espero por ti

diabólica hechicera.