Sentado en mi soledad más pura
casi tan puta como una Gorgona
en su sin significado mas pulcro,
ya no me muerdo las manos ni desfiguro el rostro
termine por contemplar mis asesinatos en nombre del amor,
una falacia que descubrí durante la caída de mis lagrimas solitarias.
no soy mejor que nadie y pueda sea peor que todos
pero intento ser bueno
aunque nada consiga, nada gane,
me duelen mis piernas ya no pueden saltar
mis manos agotadas y mis horribles ojos marrones
oscuros como la muerte que significa este país
de serpientes y calaveras de azúcar,
mi ojos no tienen brillo como el cielo azul,
no soy un encanto como el desierto
mi historia opaca ante las arenas eternas de Egipto
porque compararse para que saberse
medido no dar el peso
mis palabras están rotas y jamás funcionan
las palabras no hacen el amor,
hacen la ausencia me dijo Pizarnik entre el humo del cigarro.
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