M. es un hombre común a quien vemos en su vida cotidiana y deambulando
por la ciudad. Pero es también “un cura reaccionario, sobreviviente de
la vieja derecha”, alguien “rechazado por todos”. Podemos verlo no como
individuo ni como psicólogo, sino como “un caso que ilumina contextos”
La combinación de una trama ficcional más dispersiva que errática se
homologa con materiales y discursos también heterogéneos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario