Y Danzamos; enfrente, entre y arriba de la hoguera, se ha quemado la
mortalidad, dejamos de ser hombres, nos convertimos en fantasmas,
reencarnamos en la inmensidad de la noche, convertidos en la luz del
fuego y volvimos a bailar entre; muertos sangre, y la otredad. Terma
Beltaine, pero el fuego jamás. -Sigamos Bailando-
Algunos obituarios son historias de amor.
Mientras otros cuentos de dolor.
Otros inspiran poetas.
Algunos deprimen a los frágiles.
Son susurros afilados, son tan intensos que duelen y tan bellos que emocionan, susurran, hablan y recitan lamentos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario