jueves, noviembre 17, 2011

Que hayas leído esta carta me libera de la prisión de mi mudez

El mundo da vueltas, desde su creación, innumerables ciclos temporales y ciclos solares que generan un movimiento perpetuo en la tierra, ese movimiento genera la vida, hace que no se caliente de sobremanera la tierra y que de igual forma no se congelé, es el movimiento, es la armonía que mantiene un equilibro y el orden natural de las cosas, en pequeña escala también nos movemos, la sangre se mueve, las neuronas generan electricidad el corazón bombea y nuestras células se mueven permitiéndonos vivir, es un ciclo, un eterno retorno, un espiral y una camino envuelto en energía.

Es como si quisiéramos definir a la magia o a la ciencia, es vida, es movimiento, pero no, es lo natural y su misterio que nos tiene perplejos con la maravilla del mundo, una ola que nos arrastra nos moja y os revuelca en la creciente espiral, el conocimiento nos hace fuertes abre nuestra conciencia y nos lleva a ser mejores.

Es tonto es tan idiota que esto que sienta sea minimizado por la distancia, por el mundo por el ciclo universal del sol en los astros, soy tan pequeño y mi amor no alcanza…para llenar los espacios. Nunca alcanza, no puedo llegar al cielo, no puedo cruzar un océano, ni apagar el sol, o derretir el hielo perpetuó ártico, es como si fuera tan insuficiente para crear maravillas que a completen el mundo, pese a ello soy una peña fuerza natural y una pequeña irrelevante mancha en un grano de arena, parte de todo que forma parte del núcleo y mi movimiento permite el movimiento universal, quisiera poder volar, y llegar a la ventana, no sabes los deseos que tengo que de verte y escucharte, te extraño mucho y tengo avidez de ti, de tu sonrisa y tu mirada. te extraño de todas las formas imaginables, de las inexistentes y de las que están prohibidas extrañar.

El tiempo para los humanos nos es tan efímero, si pensamos en que el universo es eterno y su vida no tiene límites nosotros sólo somos algo que sucede… pero qué más da, me importa, a mi el instante, somos mortales atados a nuestro destino… y esa cualidad nos otorga un precioso don, el de el instante, tan fugaz tan efímero pero que tiene la fuerza de la mitad de los soles en el universo, y el poder de todos los que van a estallar, porque somos el movimiento. No me estoy deteniendo aunque quisiera, o quiero detenerme y quiero llegar, quiero ir quiero ver, y saber, soy esto y otras cosas. Somos lo que somos porque nosotros creemos que lo somos, mi voluntad y mis sentimientos, la fe y mis conocimientos.

¿Qué se siente, estar sentado en la playa junto a ti? Quisiera enterarme, y compararlo con la situación de dormir contigo y despertar mirándote… planear un día y entrarme de no fue algo que duro un momento, yo tan apegado a creer es casi ingenuidad infantil, me quedan los muros y los cuido a diario para que no se caigan, unos recuerdos intensos y esperanzas, pero no me rindo, lucho, quiero luchar más, y me pregunto si será suficiente si algún día el esfuerzo traerá recompensas, pero la verdad es que uno lucha por lo que quiere sin esperar nada a cambio, cuando el motivo es algo superior, uno saca lo mejor de si contagiado por lo que el reflejo del espejó se ve.

No pienso en ser una coincidencia ni me siento especial ablando de destino, es como fue, es como es, es como jamás será… siempre todo cambia, porque somos movimiento, pero queda siempre el estima como un tatuaje bíblico en la piel, en la mente y el corazón que los motivos que nos inspiran siempre nos atan, no es la hermosura en un rostro, los cabellos que brillan con la luz, ni es la mirada violeta de unos lilas o la peca misteriosa que encanta, no es la figura o es la edad gozada a través de los años, es mas allá, son las ideas los actos, la mente, las creencias las locuras y los gustos, los enfados, las lagrimas, lo que es verdadero e importa más, siempre sin que importe la edad, seremos viejos y abatidos por el tiempo, exiliados de un mundo que no nos entiende ni no nos pertenece, porque nacimos aquí y tenemos que ganarnos el derecho a triunfar en el.

Tan difícil esta vida imaginaria superando la ficción, esta realidad perpleja que desvía los sentidos en la cotidianidad de las cosas maravillosas; dormir con el sonido de los grillos y despertar con el trinar de las aves, ver en la terrible y maldita ciudad mounstro donde vivo un amanecer o un atardecer solitario en el recuerdo de tu mano con la mía, ¡Que Gozo!.

Y me muevo por eso escribo por ello lo digo; Sí es verdad, me gustas, y te amo y mas allá de todo eso… eres movimiento, el soplo de dios que dio vida al universo, la maravilla y la reina del espejo, lo digo sin miedo, porque tanto nos separa, que ya no existe distancia que nos separe mas, y lo digo porque necesitó decirlo, porqué me urge gritarlo, porque si me lo guardo se marchita, porque si lo silencio morirá y no quiero. Y si lo digo es porque es así, lo digo sin esperar nada a cambio, porque así soy, porque tenía que decirlo, y lo digo sin pedir nada, prefiero decir la verdad aun que esta me traiga la muerte a una mentira. Lo que se siente es real y cada ser siente diferente, cree diferente, y a veces ocurren milagros que atan con hilos de oro y plata a dos y hacen uno, otras veces se desenreda el hilo, pero siempre todo está en movimiento hasta el final. Todo se mueve, yo me estoy moviendo porque no quiero morir, quiero vivir y ver el final…

Oscar

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